El concepto de Marketing ha evolucionado significativamente debido al desarrollo tecnológico y a la revolución mediática que ha supuesto Internet, como espacio plural en el cual todo lo que deseamos se encuentra al alcance de un clic. Nuevas maneras de entender la comunicación y por consiguiente, las relaciones empresa-consumidor. En primer lugar, el Marketing Online sigue un modelo que se retroalimenta, valorando las preferencias del consumidor y observando su comportamiento. Por ello, en una sociedad globalizada donde los consumidores se desenvuelven con soltura entre la vorágine de información de la que disponen en la red, las viejas estrategias del Marketing han quedado obsoletas. Nuevos tiempos, nuevas técnicas, nuevas consignas.
Personalizar la relación entre empresas y clientes resulta vital para acercar los productos a los posibles compradores. Es necesario escucharlos, estimulando su participación en entornos adecuados, creando comunidades, por ejemplo.
De ahí, la importancia de los Social Media. La creación de blogs y el aprovechamiento de otros ya existentes para aumentar el tráfico de una web y la publicación de vídeos y podcast a través de Youtube u otros canales, conforman algunas de las estrategias del Marketing Online. Asimismo, no se debe subestimar el alcance de las redes sociales, ya que generalmente los consumidores confían más en las recomendaciones de los amigos y del medio cercano que en la publicidad. Es necesario socializar los mensajes publicitarios para generar confianza y facilitar que se compartan en foros donde los usuarios se sientan cómodos hablando sobre sus intereses y preferencias. Así, se fortalece la marca con sus aportaciones y se establece un trato directo y efectivo, conservando vigente el boca a boca desde una perspectiva digital.
Más allá de las campañas en las que una empresa contrata la aparición de sus anuncios en diversas localizaciones, la optimización de una web comercial para situarla en las primeras páginas de resultados en los diferentes buscadores, lo que se conoce como SEO (Search Engine Optimization), demanda un trabajo constante en la estrategia de marketing online que garantice que el sitio de una empresa sea reconocido mediante un conjunto de palabras claves específicas, que le doten de visibilidad en las búsquedas y de mayor tráfico por parte de clientes potenciales. Ampliando esta estrategia, las acciones SEM (Search Engine Marketing) incluyen enlaces patrocinados por las empresas, relacionados directamente con las búsquedas que los usuarios teclean en los buscadores. Se facturan por cada click que se realice sobre ellos, fijándose las cantidades y la posición en los resultados del buscador mediante un sistema de pujas.
En cuanto al Email Marketing resulta ser una técnica brillante en términos de costes y resultados. Gracias a lo económico de su formato y a la prácticamente infinita difusión, se convierte en una herramienta tremendamente valiosa para la captación y consolidación de clientes. Resulta prioritario no descuidar la imagen y el contenido de los e-mail, así como el diseño de la campaña, dirigiendo los envíos a sectores concretos del público.
Gestionar este tipo de estrategias requiere un Plan de Marketing Online en el que se analicen y actualicen constantemente las actuaciones a seguir, manteniendo una línea publicitaria desde una visión inteligente y participativa de los nuevos mercados que se abren.